Siempre he pensado que la manera en la que empiezas el día marca el rumbo de todo lo que viene después.
Hay mañanas en las que parece que el tiempo vuela y apenas puedes tomarte un café, y otras en las que sientes que tienes el control de todo.
La diferencia, al menos en mi experiencia, está en los hábitos que sigues al despertar.
Aquí te comparto 10 cosas que me han funcionado para arrancar las mañanas con más energía y claridad. ¡Espero que te sirvan!
1. Establecer un horario fijo para levantarse
Esto ha sido clave para mí. Cuando mantengo un horario regular, no me siento desorientada al despertar. Además, tengo más tiempo para mí antes de que empiece el caos del día.
(Aunque a veces cuesta, mi cuerpo lo agradece.)
2. Dedicar un momento solo para ti
Algo tan sencillo como sentarme con mi taza de té y pensar en cómo quiero que sea mi día marca una gran diferencia.
Es mi momento para respirar, organizar mis pensamientos y llenarme de motivación.
3. Beber un vaso de agua al despertar
Sé que suena básico, pero muchas veces lo olvidaba. Ahora tengo un vaso en la mesita de noche y lo tomo nada más despertarme.
Es increíble cómo algo tan simple puede hacerte sentir más despierta.
4. Preparar un desayuno que realmente disfrutes
Para mí, el desayuno es sagrado. No tiene que ser complicado, pero sí algo que me guste.
Mi favorito últimamente es un bol de yogur natural con plátano, un puñado de frutos secos y un toque de miel. Me da energía y me pone de buen humor.
5. Incorporar algo de movimiento
No voy a decirte que hago ejercicio todas las mañanas porque no sería verdad, pero me encanta estirarme un poco o incluso caminar por casa mientras organizo mis ideas.
Me ayuda a despejarme y a sentirme activa.
6. Ordenar tu espacio antes de empezar
No sé si a ti también te pasa, pero trabajar o empezar el día con todo desordenado me genera estrés.
Dedico cinco minutos a dejar recogido lo esencial, y eso me da la sensación de empezar con buen pie.
7. Hacer una lista corta de tareas importantes
Algo que me ha funcionado mucho es escribir las tres cosas más importantes que quiero lograr en el día.
Así, aunque no haga todo, sé que avancé en lo que realmente importa.
8. Dejar el móvil para después
Este ha sido uno de mis mayores retos. Antes, lo primero que hacía al despertar era revisar redes sociales, y terminaba perdiendo tiempo y energía.
Ahora intento no tocarlo hasta que he hecho al menos un par de cosas de mi rutina.
9. Salir un momento al aire libre
Aunque sea abrir la ventana y respirar profundamente. La luz natural y el aire fresco tienen algo que me despeja.
Si tienes un balcón o puedes salir a la calle, mucho mejor.
10. Empezar con una sonrisa
Puede sonar un poco cursi, pero me gusta pensar en algo bueno al despertar, algo que me haga sonreír.
A veces, simplemente pienso en lo bien que me sentará mi desayuno, y con eso basta para arrancar con buen ánimo.
No tienes que implementar todos estos hábitos de golpe. Empieza con uno o dos, y poco a poco vete añadiendo más.
Lo importante es encontrar lo que funciona para ti y adaptarlo a tus necesidades.
¿Tienes alguna rutina especial que te ayude a empezar bien el día? ¡Me encantaría leerla en los comentarios! 😊
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