🤯 ¿Te estás planteando dejar de ver las noticias? ¿Tiene esa decisión alguna consecuencia importante en tu vida? 😳 ¡Te lo cuento!
Tiempo de lectura 3:30 min.
Hay quienes piensan que dejar de ver las noticias es sinónimo de ser personas desinformadas o, peor aún, piensan que es sinónimo de ser personas poco interesadas por los demás. ¿Es realmente una persona egoísta quien deja de ver los noticieros?
En mi casa siempre se han visto las noticias. “El parte”, como lo llamaba mi abuela cuando yo era pequeña, era el pan nuestro de cada día. Muchas veces no comíamos pan, pero las noticias se veían SIEMPRE.
Desde hace aproximadamente 6 años, mi marido y yo decidimos (casi sin darnos cuenta) dejar de ver “el parte”. ¿Por qué? Y, más importante aún, ¿qué consecuencias ha traído esto a nuestra vida? 👇 ¡Sigue leyendo, porque tengo mucho que contarte! 👇
¿Te has dado cuenta de que las noticias no suelen contarte nada positivo? Ver las noticias te sumerge en un mar de dudas y negatividad del que es muy difícil salir. Te entristece y te hace pensar que la humanidad está apunto de colapsar. Y, por si eso fuera poco, lo peor es que no puedes hacer nada para evitar ninguna de esas noticias. Así que eres un mero espectador de los desastres ajenos y solo puedes mirar y sentirte mal.
Un terremoto aquí, una guerra allí, un montón de muertos en no sé dónde, la Bolsa cae, los impuestos suben, este señor del gobierno se pelea con este, y el otro dice que este es un ladrón…
Por supuesto, no estoy diciendo que en el mundo no pasen cosas malas. Pasan cada día. No estoy ajena a la realidad, ni mucho menos. Pero, ¿qué bien le podría hacer a mi vida o al mundo que dedicase mis energías a pensar en cosas que no puedo solucionar?
Además, el sensacionalismo se nos ha ido de las manos. La guerra de Ucrania ha sido una muestra más de que ya no importa cuánta sangre aparezcan o cuánto muertos en primer plano. Lo que importa es «la información», da igual lo cruda o repugnante que pueda ser.
Estamos en el siglo XXI y decir que la “información” que ofrecen los medios de comunicación está sesgada y es de todo menos neutral, parece tan obvio como decir que necesitamos aire para vivir.
Todos lo sabemos.
Por un lado, las noticias son manejadas por personas que tienen intereses. Ya sean empresas o el propio gobierno, siempre hay un interés detrás de cada una de las noticias.
Por otro lado, ¿te has fijado en que una noticia bomba tapa otra? Por ejemplo, en 2020 no había noticias más allá de algo llamado Covid-19. Pero, ahora que hay guerra en Ucrania, ¿ya no hay virus?
En definitiva, unas noticias cubren a otras y las más importantes siempre son las que son más lucrativas para alguien.
Con todo esto en mente, ¿por qué me podría interesar ver algo que ya sé que ha sido manipulado?
Si te fijas, a los canales de noticias y a los periodistas se los suele conocer como «creadores de opinión«. (Es que a veces escupimos verdades y ni siquiera nos damos cuenta).
Una cosa que me repetían constantemente a mi alrededor, una vez tras otra, cuando dije que iba a dejar de ver las noticias era: “¿Y cómo vas a estar informada de lo que pasa en el mundo?”
Sin yo saberlo, no tuve que responder. El tiempo respondió a la pregunta por sí solo… ¡No puedes estar desinformado! La desinformación hoy en día es una utopía.
Siempre hay un amigo, un conocido que no te quiere o un cuñado que te cuenta todo lo que está pasando.
¿¡Te enteraste de lo que dijo este político!? ¡¿Has visto como se ha gastado por todos lados el aceite de girasol?!
Si no tienes un amigo o un cuñado cotilla, siempre te quedará Google. Que se encarga de meterte por los ojos la noticia cuando menos te lo esperas.
Llevo 6 años prácticamente sin ver las noticias y me he enterado de todas las cosas de las que merecía la pena enterarse, (y también de algunas de las que no).
¿Los resultados de estos seis años sin ver las noticias? (O, mejor dicho, prácticamente sin verlas, ya que en los últimos meses les hemos prestado algo más de atención) ¡Muchos y muy buenos!
1️⃣ En primer lugar, me he seguido enterando de las cosas “importantes”, desechando así todo el resto de paja que aparece en los noticieros y que no hace más que minar la moral.
2️⃣ En segundo lugar, he dejado de tener tanto miedo. Y esto es algo que no se valora lo suficiente, sobre todo en el caso de los niños y lo impresionables que pueden ser. Desde niña había desarrollado un miedo atroz debido a muchas de las cosas que veía por las noticias. Un miedo que me acompañó toda mi infancia y parte de mi juventud y que, poco a poco, ha ido desapareciendo.
3️⃣ La manipulación de los medios de comunicación no me afecta tanto en mi vida diaria.
4️⃣ Ahora puedo mirar la vida de una forma más optimista. Sin ocupar mis energías en rumiar las malas noticias que me quieren contar.
Estas son algunas de las consecuencias que se me han ocurrido mientras escribía el post. Pero la realidad es que hay muchas más.
No le damos la suficiente importancia a lo que consumimos en materia de información. Pero, para mí, ser consciente de lo que consumo es super importante. Gracias a haber dejado de ver las noticias, ahora puedo controlar un poco mejor la información que entra en mi mente.
Según muchos expertos, ver las noticias es como consumir una droga o alimentarnos mal. A veces, cuidamos lo que comemos de una manera obsesiva. Pero no nos preocupa lo que nos metemos por los ojos y los oídos. Sin embargo, la realidad es que puede ser peor para el estómago una mala noticia que una comida podrida.
Finalmente, cada uno decide cómo nutre su mente, del mismo modo que cada uno decide qué comer. Pero el hecho de dejar de ver las noticias ha hecho que a mí me resulte más fácil decidir con qué información quiero alimentarme.
Y, créeme: es mejor estar desinformado, que estar mal informado.
¿Y tú? ¿Sigues viendo las noticias? Si quieres dejar tu opinión, la cajita de comentarios está esperando tus palabras. Yo estaré encantada de leerte y seguro que el resto de lectores también.